¿Cuándo ir al psicólogo?

Una de las dudas que más nos aborda a la hora de plantearnos empezar un proceso terapéutico es si realmente lo necesitamos. Hay varias señales que pueden orientarnos en esta cuestión.

¿Cómo sé si necesito terapia? ¿Cuándo debo ir al psicólogo?

Si quieres saber más sobre en qué consiste la terapia psicológica, puedes leer nuestro artículo sobre ello pinchando aquí.

Señales que nos indican que podemos necesitar ayuda

Los intentos de solucionarlo, no han dado resultados

Una de las señales que nos pueden indicar que necesitamos acudir a terapia, viene de haber intentado solucionar esta situación y no haber podido reducir nuestro malestar. Esto es un indicador de los recursos personales que tenemos no son los adecuados para resolver la situación. Puede ser que los tengamos pero no los estamos poniendo en marcha. Estas herramientas personales son un factor de protección para los problemas psicológicos. Sin embargo, hay momentos vitales en los que necesitamos aprender nuevos recursos o cómo ponerlos en marcha. La terapia psicológica tiene como objetivo disminuir nuestro sufrimiento. Es un proceso de aprendizaje para adquirir las herramientas para afrontar las diferentes situaciones vitales que nos puedan ir sucediendo.

El malestar lleva en tu vida un tiempo prolongado o su intensidad es tan alta que resultar difícil de manejar

El tiempo y la intensidad del malestar que sentimos son otros de los factores más importantes a la hora de acudir a terapia psicológica . Si tenemos un sufrimiento intenso que nos acompaña cada día, que nos desborda o que no nos permite llevar una vida normal, es el momento de buscar ayuda profesional. Puede que sea un malestar que se mantiene durante un tiempo prolongado o que no parece remitir. Si  tiene una intensidad demasiado grave, nos indica que es el momento de buscar ayuda de un psicólogo profesional.

La situación afecta a las áreas más importantes de tu vida

Una forma de medir cuánto afecta un problema o una situación a nuestra salud emocional y mental es la cantidad de áreas en las que nos está afectando. Si es a dos o más áreas de nuestra vida es también un indicador muy importante de que es momento de buscar ayuda para solucionar la situación desagradable. El criterio de que sean dos o más áreas es debido a que un problema que surge en un área de nuestra vida (por ejemplo en el área laboral o académica), se generaliza a otra área diferente (por ejemplo a nuestra área social o personal). Por lo tanto está empezando a afectar a más ámbitos que donde se originó el problema en un primer momento. Si el problema ya de origen afecta a dos ámbitos importantes, indica que va a tener una gran importancia para nosotros y que probablemente nos afectará en más aspectos con el tiempo.

He dejado de disfrutar de las cosas que antes me encantaban

Por último, un factor importante para saber cuándo ir al psicólogo es percibir que ya no disfrutamos de las actividades que antes nos gustaban. Una parte importante que mantiene nuestro estado de ánimo y una buena salud emocional es la realización de actividades agradables, incluyendo las de índole social. Realizar estas actividades de manera regular nos ayuda a mantener un estado de ánimo positivo, pero también son un indicador de éste. Si un problema está empezando a afectarnos de tal forma que no sentimos placer por las cosas que antes disfrutábamos, puede que sea una señal de que podemos necesitar ayuda para conseguir mejorar.

Quiero aprender, crecer a nivel personal

Existen también motivos importantes para ir al psicólogo que no vienen por un problema o malestar: la motivación por crecer y aprender. Es importante saber qué factores pueden indicarnos la necesidad de acudir a terapia sin olvidar que se trata de un proceso de aprendizaje y crecimiento personal. No es necesario esperar a que nos encontremos mal para empezar un proceso de terapia, sino que la voluntad de querer cambiar y crecer. es suficiente motivo para emprender este viaje.

 

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