Desmontando tres mitos sobre el amor

Mitos sobre el amor. Cuando nos vemos inmersos en una primera relación solemos hacerlo con desconocimiento. Imaginamos cómo es tener una relación, basándonos en lo que hemos visto en nuestro propio sistema familiar, amigos, películas, cómics o mangas, series, libros, … En estas primeras relaciones sale a la luz qué tipo de vinculación tenemos, cómo nos encontramos a nivel de autoestima, qué habilidades sociales tenemos, dificultades personales y un largo etc.

Se trata de un tema complejo de abordar, que puede hacerse desde distintas perspectivas o subtemas. Hoy nos vamos a centrar en algunos mitos sobre el amor que todavía están presentes en nuestra sociedad y cultura, y pueden estar afectando tu perspectiva y vivencia de lo que es realmente el amor.

No aceptar un no por respuesta es una muestra de amor.

Empezamos con uno de los mitos sobre el amor muy extendido, pero también muy rebatido. No es extraño que exista esta idea, pues son muchas las historias de amor que conocemos en las que  aparece esa parte de insistencia y persecución del otro a pesar de haber recibido una negativa. Nos han enseñado que el amor verdadero es persistente.  Si desistimos, es porque no queremos a esa persona de verdad.

En realidad, el amor es cambiante. No sólo puede desaparecer con el tiempo, sino que, cuando perdura, va cambiando a lo largo del ciclo vital y de la etapa en la que se encuentre una pareja. Por ello, dejar de querer o sentir algo diferente, no significa que lo anterior fuese menos verdadero o auténtico. Simplemente significa que somos seres humanos y los sentimientos van cambiando a lo largo del tiempo, la vida es cambiante por sí misma.

No aceptar un no por respuesta, es una forma insana de relacionarnos con los demás. Implica no respetar al otro y no tolerar el rechazo, la frustración y el dolor que ello conlleva y que forma parte de la vida. Esto no es sano para uno mismo ni para los demás. Igual que nos gustaría que respetaran cuando nosotros queremos rechazar algo o a alguien, tenemos que buscar lo mismo para los demás. Un mundo dónde ningún límite personal se vea vulnerado y podamos respetarnos es la base para poder construir relaciones de buen trato.

Amor a primera vista

Es frecuente esperar conocer a alguien por quien sentirnos atraídos y conectados desde el primer momento en que nos vemos. Esta creencia es algo frecuente debido al contenido que hemos consumido a lo largo de nuestra vida en películas o libros donde los protagonistas solamente con verse ya se enamoraban de forma intensa.

El amor a primera vista se basa en la apariencia física. El amor dentro del contexto de una pareja sentimental es algo mucho más complejo que el atractivo físico. Es importante darle su justo valor y es cierto que, al conocer a alguien, es importante poder sentir atracción y química. Esto se puede sentir seamos como seamos, no hace falta que nos rijamos por unas reglas y cánones rígidos. De hecho, la mayoría de la población no encaja dentro de los cánones actuales, al ser idealizaciones del aspecto físico y  casi imposibles de alcanzar. Química significa que sientas algo de atracción hacia esa persona y parte de esa atracción puede ser por su aspecto físico, pero también implica conocer e interactuar con la persona: su personalidad, sus gustos, sus aspiraciones, su inteligencia e inquietudes, etc.

Conocer a alguien de forma más profunda y sentirnos conectados y atraídos por ellos a estos niveles, aparte del físico, es algo fundamental para tener compatibilidad con nuestra pareja, formar una relación con bases estables y sanas.

Por tanto, el amor a primera vista se reduce exclusivamente al atractivo físico. Se basa en los cánones de belleza y genera muchas decepciones si nos basamos exclusivamente en ello a la hora de escoger una pareja sentimental.

La intensidad sobre la calidad emocional.

Los romances de Hollywood son muy intensos. Se forman parejas dónde pasan del amor más profundo, feliz y satisfactorio a crisis de pareja especialmente marcadas, dónde se hacen daño, se generan enormes traiciones, desconfianzas e incluso, se pierde el respeto del uno por el otro. Y de repente, de una forma muy poco realista, vuelven a reconciliarse y consiguen que todo lo que ha ocurrido, por muy grave que fuese, se quede en un segundo plano relegado al olvido.

Por ello, podemos interpretar como amor relaciones con muchos picos emocionales y muy inestables. Es frecuente confundir la estabilidad con aburrimiento si partimos de esta premisa.  Lo que ocurre es que estas relaciones están abocadas a fracasar, ya que no generan ningún tipo de estabilidad y, por tanto, ningún tipo de calidad emocional.

Los vaivenes emocionales hacen imposible tener una relación en la que estemos a gusto y podamos generar un proyecto de pareja o incluso de futuro. Y lo que es peor, nos van a hacer estar en una relación insana.

Es inevitable que haya conflictos en las parejas. Pero es importante poder acercar posturas, evitar hacerse daño, ser sinceros y construir puentes durante la resolución del conflicto. En la vida real no ocurre como en las relaciones de Hollywood: si son frecuentes los conflictos y el daño, es posible que no logremos conectar de nuevo con nuestra pareja.

Además, necesitamos sentirnos seguros con nuestras parejas. ¿Qué clase de seguridad nos brinda una pareja tan inestable? Emocionalmente termina desgastando tener tantos cambios abruptos dentro de una relación. Que tu pareja pase de ser la persona más importante para ti a tu peor enemigo. A lo largo de estas relaciones se generan heridas que no van a ser fáciles de sanar, donde se vulneran principios básicos de cualquier relación, como es el hecho de cuidar al otro a nivel emocional y psicológico.

Aunque hemos abordado tres mitos sobre el amor muy presentes socialmente, quedarían muchos más. Es fundamental poder cuestionarnos nuestro papel y nuestras creencias como parejas y así, poder buscar una relación sentimental que sea sana y nos proporcione seguridad y bienestar. Una relación en la que podamos también ser elementos sanos para esa persona que queremos. Si crees que puedes estar teniendo dificultades con este tema, no dudes en contactar con nosotros.

Julia Martín